Como casi todas las estrellas europeas, Dražen Petrović se convirtió en profesional a una corta edad. A los 17 años ya era un jugador de 1.80m con la habilidad propia de un base armador y la genialidad de un superdotado que derrochaba talento en el club Šibenka de Croacia.
Era un ganador nato, capaz de levantar la moral de sus compañeros en los momentos más difíciles y además de tener la habilidad de quitarle la presión de la afición rival a su equipo con su peculiar actitud provocadora.
El Šibenka pronto le quedó pequeño. Su siguiente destino fue el Cibona de Zagreb. En su primera temporada ganó la Liga, la Copa, y por primera vez en la historia del club, la Copa de Europa. Petrović tenía 21 años (1.96m) cuando se plantó en la final de la competición más prestigiosa del continente. El rival y gran favorito era el Real Madrid aunque Dražen tenía otro plan, pues destrozó a la defensa blanca con un recital de 36 puntos. Su destino y el del Real Madrid quedaron ligados aquella tarde.
Al año siguiente, el Cibona volvió a llegar a la final. Esta vez, el rival era el Zalguiris Kaunas de Arvydas Sabonis, Kurtinaitis y compañía. De nuevo, los croatas consiguieron el triunfo, aunque la actuación de Petrović fue más discreta tras aportar 22 puntos. Petro jugaría dos años más con el club de Zagreb justo hasta después de los Juegos Olímpicos de Seúl 88, en los que logró una medalla de plata.
Después de su aventura olímpica, Petrović inició una etapa con el Real Madrid pero la corona de la liga, el objetivo principal, no la pudo conseguir. De cualquier manera, demostró que era un jugador al que no le paraban los elogios. Su marcha hacia América era inminente, y antes de despedirse del Real Madrid, consiguió la Recopa con una sensacional actuación de 62 puntos.
Su primer destino en la NBA fue Portland. Con los TrailBlazers comenzó una rutina diferente para tratar de ganar peso y masa muscular, se enfocó en mejorar su juego aunque las cosas no resultaron como planeó. Portland tenía un gran equipo y antes que él estaba la estrella Clyde Drexler. La relación con el entrenador Rick Adelman se desboronó y el banquillo se convirtió en el lugar más habitual para Petrović. En su año de novato durante la temporada 1989-90, promedió 7.4 puntos en 12 minutos de juego.
Para la temporada 1990-91, el veterano guardia Danny Ainge fue agregado al equipo, y el tiempo de juego de Petrović se redujo a siete minutos por juego. Mientras tanto, nuevamente estaba haciendo historia con el equipo nacional de Yugoslavia que se convertiría en campeona del mundo después de vencer en la final a la Unión Soviética en Buenos Aires, en el Campeonato Mundial FIBA 1990.
Más adelante, en un intercambio de tres bandas con los Denver Nugget, los Blazers lo enviaron a los New Jersey Nets a cambio de una selección de primera ronda en el siguiente draft y además a Walter Davis, quien fue enviado desde Denver a Portland.
«El Mozart del Baloncesto» demostró que necesitaba más minutos en la duela para demotrar su talento y así lo hizo en New Jersey. En sus dos primeras temporadas con los Nets, promedió 20.6 y 22.3 puntos por juego, respectivamente.
En medio de esas dos temporadas, Dražen ganó con la selección croata una medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Barcelona ’92. En el verano de 1993, después de su mejor temporada en la NBA y la eliminación en primera ronda de los Nets por los Cleveland Cavaliers, Petrović viajó a Berlín, donde el equipo nacional croata estaba jugando un torneo de clasificación para el EuroBasket de 1993.
Después del torneo, Petrović decidió regresar por carretera a Croacia, con su nueva novia Klara Szalantzy y su amiga la basquetbolista Hilal Edebal, en lugar de volar con el equipo de regreso a Zagreb. En el camino, Szalantzy conducía un pequeño automóvil rojo Volkswagen Golf donde los tres habían manejado durante horas por la Autobahn 9. En ese momento, Petrović dormía en el asiento del copiloto.
El 7 de junio de 1993, poco después de las 5:20 pm, hora del centro de Europa, un camión de los Países Bajos derrapó en la carretera mojada al evitar a un automóvil que se detuvo frente a él. El camión se detuvo y se extendió por los tres carriles de la autopista. Segundos después, el Volkswagen Golf se estrelló contra el camión, dejando a Szalantzy y Edebal con graves heridas en tanto que Petrović, que no llevaba puesto el cinturón de seguridad , salió disparado por el parabrisas para estrellarse con el camión.
Los rescatistas intentaron desesperadamente revivir a Petrović, pero sus esfuerzos no tuvieron éxito debido a la gravedad del trauma en la cabeza que sufrió por el accidente. Dražen Petrović perdería la vida a los 28 años.
Horas después del accidente fatal, el equipo nacional croata recibió la noticia de la muerte de su capitán en un accidente automovilístico. A la mañana siguiente, el martes 8 de junio, los New Jersey Nets realizaron una conferencia de prensa en la Meadowlands Arena. La sala de conferencias de prensa estaba en silencio. Willis Reed, el Gerente General, habló primero y leyó una declaración escrita previamente. Al final de la declaración, Reed dijo: «para mí, es como perder un hijo», respondió varias preguntas de los medios, pero no pudo continuar al no poder contener sus emociones.
Después de su muerte, los New Jersey Nets retiraron su jersey número 3 y en 2002, su número 10 fue retirado por el Cibona, el segundo club profesional para el que jugó en el extranjero. Dražen Petrović fue elegido como el mejor jugador de baloncesto europeo de la historia por los jugadores en el FIBA EuroBasket 2013, y también fue consagrado en el Naismith Memorial Basketball Hall of Fame.
«Petro» fue inducido al Salón de la Fama de FIBA y también recibió a título póstumo la Orden Olímpica en 1993, que es el premio más alto del Movimiento Olímpico con respecto a un deporte. En 2008, Petrović fue honrado como uno de los 50 mejores jugadores en la historia de la Euroliga.
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