Según el sitio CNBC, Coca-Cola anunció oficialmente que ha comprado el control total de la bebida deportiva Bodyarmor por la friolera cantidad de $ 5.6 billones de dólares. Esta compra es la mayor adquisición de marca para Coca-Cola hasta el momento.
La corporación multinacional de bebidas supuestamente compró por primera vez una participación del 15% en Bodyarmor en 2018, lo que la convierte en el segundo mayor accionista de la compañía de bebidas deportivas. En el momento de la compra de Coca-Cola de una participación del 15%, Kobe Bryant era el tercer accionista más grande debido a su inversión en la compañía en 2013, solo dos años después de la fundación de Bodyarmor.
Bryant invirtió $ 5 millones para adquirir una participación del 10 por ciento en BodyArmor, cuando la marca advenediza había generado ingresos insignificantes y estaba en los primeros días de su búsqueda en un mercado que lidera el gigante Gatorade.
Hoy BodyArmor es la segunda marca más grande de bebidas deportivas, solo por abajo de Gatorade, que es propiedad de PepsiCo. Powerade, que también es propiedad de Coca Cola, es la tercera bebida deportiva más importante del mercado.
Pero el papel de Bryant en BodyArmor fue más allá de su inversión. Se sentó en la junta directiva de la compañía, se desempeñó como uno de sus embajadores de marca más prominentes y tenía control creativo sobre todas sus campañas publicitarias nacionales.
Bryant también escribió, dirigió y narró el primer anuncio televisivo de la compañía, que debutó en abril de 2017.
Pero el caso es que el 10% que el jugador de la NBA poseía de la marca de bebidas energéticas Bodyarmor, le va a reportar a Vanessa Bryant y sus hijas unos $400 millones de dólares después de esta adquisición por parte de Coca-Cola.
Las inversiones y movimientos que hizo el deportista tras su retiro de las canchas han sido casi tan exitosas como su trayectoria como jugador. La marca Kobe Bryant generó unos $ 680 millones de dólares a lo largo de su carrera entre salarios y contratos publicitarios.
