Michael Jordan, ése desconocido

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Michael, el ser humano, su vida privada.  

Por: Juan Antonio Razo

 

«Me doy cuenta que soy negro, pero me gusta que me vean como persona; eso es lo que todos queremos y por lo que luchó Martin Luther King.»    Michael Jordan

«Ser padre es un desafío. Si tienes hijos sabes que también acepto ese reto. El consejo que daría a los padres es que sólo dejen que sus hijos disfruten el juego.» Michael Jordan

«El gran secreto de Michael fue que pudo ser grandioso en la cancha y un hombre común en la vida diaria.»  Juan Antonio Razo

En este artículo describiré algunos aspectos o pasajes de la vida de Michael Jordan que considero son interesantes, importantes y poco conocidos. No me refiero al lado oscuro de MJ, puesto que considero que él no lo tiene, sino a situaciones dentro y fuera de los escenarios deportivos, y de su vida privada que, dadas las circunstancias, no han sido divulgadas por los medios.

La inteligencia natural y desarrollada de Michael le ha permitido hacer prácticamente “todo” bien en su vida profesional, privada y como ser humano, pues como compañero, amigo, hijo, padre de familia, actor, hombre de negocios y demás roles los ha hecho con grado sobresaliente, pues es bien sabido que como empresario su riqueza acumulada, según el reciente dato de la revista Forbes, sobrepasa los dos mil millones de dólares (en USA es equivalente a más de dos billones de dólares).

Desde luego que hay datos que son del dominio público como el hecho de que hay una estatua afuera del “United Center” o de que fue excluido del equipo cuando estaba en la preparatoria o de que se fracturó el hueso tarso de su pie izquierdo al inició de su segunda temporada, por nombrar sólo tres. Pero hay otros datos y hechos que son poco conocidos, aún para los fans de MJ, como fue el hecho de que en una encuesta realizada, Michael resultó ser más conocido que el propio presidente Bill Clinton, veamos algunos otros:

Sucesos y datos personales poco conocidos

Michael Jordan nació el 17 de Febrero de 1963. Su carta astral sería la siguiente: Es signo Acuario, con ascendente Tauro, con la Luna en Sagitario. Tiene a Mercurio en el medio cielo (Su actividad profesional tiene que ver con la comunicación y los nervios), con Plutón en la casa V (poder en la expresión), y Marte en Leo (afán de sobresalir).

Como todo ser humano, Michael tiene varias supersticiones, fobias y manías: su fobia por el agua es poco conocida. Sacar la lengua en los lances fue su principal y peligrosa manía en las canchas. Su superstición de usar su “short” universitario fue un tanto conocida. En cambio casi todos conocemos la historia del porqué del número “23” y “45” en su playera.

Un dato no conocido es que Michael Jordan empezó a usar el seudónimo “Leroy Smith” cuando alcanzó la fama deportiva. Lo usaba al registrarse en los hoteles.

Una característica de su personalidad es ser un eterno bromista, lo que va aparejado con su sentido del humor, propios, como se sabe, de la gente inteligente.

Michael tiene desde su época de súper estrella su propio cuerpo de seguridad, lo cual, como es fácil de entender, no es cómodo. Con el tiempo MJ ha terminado por acostumbrarse.

Michael se rasura dos veces por semana el poco pelo que le queda. Esto lo hace, normalmente, martes y viernes.

Michael lleva un pequeño tatuaje que consiste en una letra griega omega a la altura de la tetilla izquierda.

Estando en la prepa, Michael tomó un curso de economía doméstica y aprendió labores como coser, cocinar, planchar, entre otras, pues pensaba que nunca se casaría.

Durante cada temporada, Michael usaba más de 150 pares de zapatos de su número 13. El promedio en la Liga es de 60. La razón era porque al medio tiempo MJ se cambiaba de tenis cuando no iban bien las cosas en el juego.

Antes de cada juego, Michael, según sus propias palabras, hacía toda una rutina a manera de ritual o superstición:

«Me pongo calcetines nuevos, zapatos nuevos, me amarro las agujetas de determinada forma, uso mis shorts Carolina y me fijo donde está sentada mi familia.»

Michael usaba una banda elástica en el brazo izquierdo en honor de su amigo y compañero de cuarto de la universidad, Buzz Peterson.

En el directorio telefónico hay varios «Michael Jordan’s» registrados y que existen en la realidad; ellos tienen que cambiar de número telefónico con cierta frecuencia por la “agradable incomodidad» que les ocasiona el ser confundidos con el MJ “real”; uno es de raza blanca y estatura diferente a los 6′ 6» que mide Michael. Cuando un “Jordan falso” hace una reservación en algún restaurante suceden dos cosas: o no le hacen caso pensando que es una tomadura de pelo o le dan la mejor mesa con champaña de cortesía pensando que es el verdadero Jordan. Cuando arriba al lugar, el «falso Jordan» tiene que comprobar su identidad.

Se sabe de otros  Michael Jordan’s, que años atrás eran jugadores universitarios, uno jugaba futbol americano y el otro basquetbol. No es difícil imaginarse las bromas o las confusiones derivadas de esta coincidencia.

Michael tiene un doble: un tipo de nombre Lee Kealon y con un parecido enorme con MJ; mide también 6’-6” y se rasura la cabeza, ambos nacieron en Brooklyn y crecieron en Wilmington, a ambos les gusta el golf y Kealon también jugaba basquetbol con la playera 23.

Cada Navidad Michael solía hacer réplicas de su reciente anillo de campeón para regalarlas a sus amistades y a la gente de North Carolina que tuvo que ver con él.

Uno de sus guardias de seguridad, con el que hizo buena amistad, de nombre Gus Lett, tenía un parecido físico con el papá de Michael y se convertiría en una especie de segundo padre a raíz de la muerte de James Jordan. Cuando a Lett se le desarrolló el cáncer, Michael se encargó de que recibiera la mejor atención médica.

Durante las finales de la temporada 1996-97, Michael jugó algunos partidos lastimado del dedo pulgar. Se le hizo una perforación al tenis, a fin de liberar la presión sobre el dedo y a la vez que sirviera de ventilación. Durante esos partidos las cámaras de televisión no perdían oportunidad para enfocar el zapato de Michael, el cual terminaría por volverse un valioso suvenir para los coleccionistas.

Si usted es de los que piensan que Michael no llora, se equivoca; en varias ocasiones ha llorado. Una fecha inolvidable fue cuando regresó al estadio de Chicago con la playera de los “Wizards” en enero 19 de 2002.

Michael es licenciado en geografía e historia; suele preguntar a boca jarro a sus amigos las capitales de cualquier estado o país, para poner a prueba sus conocimientos.

Donaciones

Michael Jordan es de los hombres más generosos y con un enorme corazón, siempre al tanto de quienes lo necesitan, en especial hacia los niños. Ha realizado toda clase de donativos y actos de apoyo a la comunidad;

Se podría pensar que cuando donó su salario de un millón de dólares cuando se contrató con los “Wizards”, el acto carecía de mérito pensando que MJ tenía cientos de millones, pero muchos, aunque tengamos poco no damos nada. Recordemos que: “No da el que tiene sino el que quiere”.

Cuando alguien hace una obra en el anonimato se expone, paradójicamente, a que otros lo acusen de que no coopera. Michael se vio y se ha visto criticado en muchas ocasiones, aunque siempre demostraría lo contrario; A ese respecto, Michael diría:

«Lo que hago, simplemente no lo público; podría organizar una conferencia de prensa para cada una de las obras que realizo para la comunidad de color, pero no lo hago. Por eso la gente no se da cuenta.»

Michael Jordan creó una organización no lucrativa, la “Michael Jordan Foundation”, para apoyar programas de caridad. Luego la cambió por la “James Jordan Boys and Girls”, en honor de su padre, para ese entonces ya fallecido y que se formó con donaciones entre el equipo Chicago y el propio Michael.

Lesiones:

En lo que respecta a la lesión del hueso tarso, ya mencionada líneas arriba, hay que recordar que MJ tuvo problemas con los directivos pues ellos querían que regresara a jugar hasta la siguiente temporada, contrario al profesionalismo de MJ que se opuso a esta decisión y regresó a jugar en la misma temporada.

Esta fue su única lesión seria. Tuvo otra al final de su carrera jugando con los “Wizards” en la rodilla derecha que derivó en una operación artroscópica.  No estamos tomando en cuenta la ya mencionada en su pulgar o cuando jugó con fiebre. Ambos incidentes durante las finales de 1996-97 y en donde no se vio privado de jugar.

 

 

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